Lunes, 28 de Septiembre de 2015. Jean-Claude abre la puerta de su despacho, son las 9 de la mañana. Tiene encima de su mesa los resúmenes de la prensa internacional del fin de semana. Un poco más allá, un informe, que, entre los demás temas del día, discutirá posteriormente con su gabinete. La carpeta pone “Catalonia”.
– Vaya cagada, lo de las preguntas – dice Jean-Claude en voz baja mientras respira aliviado recordando el reciente acuerdo del consejo para repartir 120.000 refugiados en diferentes Estados europeos.
El presidente de la Comisión decide abrir la primera página del informe. Se fija en el gráfico y en los porcentajes, antes de pedir más información sobre cada una de las formaciones que han participado de las elecciones.
Este lunes tendrá lugar una situación similar a esta. Es probable que suceda también el mismo domingo 27, a altas horas de la noche, mediante mensajes de whatsapp y correos electrónicos de urgencia.
Y la pregunta es sencilla. ¿Dónde quieres que figure tu voto? De un lado tienes a los del NO, a los del status quo. A Juncker le dará exactamente igual que se trate de Rabell o de Arrimadas, y mira que no serían precisamente dos gotas de agua, políticamente hablando. Ep! Pero, ¿y los del Sí? ¿Aquella coalición plural qué resultado ha obtenido? ¿Hay una gran mayoría independentista?
Votamos en clave europea e internacional. Y tenemos que enviar un mensaje clave al mundo: queremos decidir nuestro futuro con nuestro voto. Y queremos que ese futuro pase por la construcción de una República catalana. Y a Juncker le decimos: Jean-Claude, no haremos nada extraño. En 18 meses, haremos elecciones constituyentes, como cualquier país en proceso de transición constitucional. Un proceso homologado, sin estridencias, pero con amplia representación política, cívica e ideológica. Queremos tener la mejor relación con España: una relación de igual a igual.
Enviemos todos juntos ese mensaje este domingo. Porque tengo muchas ganas de participar al lado de federalistas y unionistas en un proceso ciudadano constituyente capaz de construir un Estado más justo y que disponga de todas las herramientas para construir un futuro mejor para los nuestros.
Silvio Falcón 